Los mejores caballeros de Conqueror’s Blade: Avalon luchan por su reina y su país inspirados por el rey Arturo y su leyenda.

El rey Arturo es una legendaria figura inglesa que sigue desconcertando a los historiadores a día de hoy con una duda: ¿existió realmente? A pesar de la diferencia de opiniones, la mayoría de los amantes de la historia coinciden en que lo más probable es que los relatos se basasen en una persona real, un guerrero que dirigió ejércitos contra los invasores sajones en los siglos V o VI.

¿Una figura legendaria o la figura detrás de la leyenda?

Las historias de batallas y heroísmo del rey Arturo llevan siglos circulando, y la primera mención al noble monarca aparece en un texto latino del 829 d.C., Historia Brittonum. También aparece en la obra del siglo XII de Geoffrey de Monmouth Historia Regum Britanniae.

Una ilustración del rey Arturo de Historia Regum Britanniae, de Geoffrey de Monmouth (1155 d.C.).

En estos textos, Arturo se reveló para gobernar Inglaterra tras demostrar su valía en numerosos enfrentamientos contra monstruos mitológicos y enemigos sobrenaturales. Aunque estas historias fantásticas fuesen solamente leyendas, sus temáticas de heroísmo frente a las adversidades inspiraron a los dirigentes en adelante. Enrique VII nombró a su primer hijo Arturo, ya que había pasado su infancia fascinado con las historias de Camelot y los caballeros de la Mesa Redonda. De hecho, llegó a redecorar su propia Mesa Redonda, que aún se puede ver en la Gran Sala del castillo de Winchester, al estilo de la estética que le obsesionaba.

La Mesa Redonda en la Gran Sala del castillo de Winchester.

Aunque la inspiración del rey Arturo se remonta a siglos atrás, la integridad de sus historias, en las que combate para defender su hogar de los invasores, lucha por su amor verdadero y supera todas sus nobles empresas, siguen siendo válidas y han pasado la prueba del tiempo. La leyenda sigue siendo importante mil años después por los valores que promueve, como la igualdad, el valor, la lealtad y el amor.

Puede que el rey Arturo no fuese un héroe real, pero existe en la mente de todos los que conocen su historia, lo que lo convierte en una auténtica leyenda.