Gran parte de las guerras europeas se libraron con armas similares, pero Francia jugaba con ventaja en la competición continental con varias armas sorprendentes que blandían en las sangrientas batallas.

No había posición más honorable en el ejército medieval francés que la de caballero, y tal poder conllevaba llevar armas de élite más efectivas. Sus heroicas apariciones en el campo de batalla los convirtieron en personajes importantes en los relatos de guerra, pero no eran nadie sin sus compañeras de acero.

La lanza

Sin duda el arma más efectiva para la caballería. Su largo mástil de madera coronado con una perforante punta metálica la convertía en el arma perfecta para llevar a caballo, ya que se podía aprovechar su longitud para atacar a la infantería a lomos del corcel. Los Gendarmes reales de Conqueror’s Blade: Paragons usan su lanza para hacer volar a sus enemigos por los aires a base de estocadas.

Además de ser tremendamente eficaces para luchar con soldados a pie, también sirve para derribar a otros caballeros de sus caballos.

La espada

La espada era la mejor opción para el combate cercano y puede que fuese el arma más importante de la Edad Media. Si un caballero se bajaba del caballo, podía confiar en su fiel espada para encargarse de sus enemigos, ya sea con una sola mano o con las dos, dependiendo de su tamaño.

La espada no solo era popular por el daño que causaba en relación al esfuerzo realizado y por su habilidad para sajar y apuñalar, sino también por su estatus de élite. Llevar una espada en el campo de batalla hacía saber a los demás que eras una persona noble y respetable.

Una espada de acero (c.1400)

El arco largo

El arco largo no era un arma que soliesen escoger los caballeros franceses del medievo, pero sí era efectiva para la infantería entre 1200 y 1535 para atacar a distancia o desde las almenas de los castillos y fortalezas. Muchos caballeros no usaban el arco largo porque lo consideraban un arma cobarde, pero demostró ser crucial en muchas de las victorias de la época.

La maza

Los caballeros franceses también llevaban a veces mazas además de su lanza o espada para poder propinar golpes más contundentes. Estaban diseñadas para aplastar a los enemigos o dejarlos inconscientes, y los caballeros las llevaban incluso en los desfiles y paseos por la corte.

Maza de acero con siete picos (c.1540)

Empápate de historia francesa con nuestros Conqueror’s Tales y descubre la inspiración tras el pueblo y la cultura de Paragons, desde su deliciosa comida a su influyente literatura o los monumentos medievales que siguen existiendo hoy en día.